La estrategia de detección precoz, vigilancia y control COVID-19 del Ministerio de Sanidad incluye las pruebas de anticuerpos lgM y lgG específicos para SARS-CoV-2 para el diagnóstico de esta enfermedad.
El anticuerpo lgM puede detectarse a los 7 días después de la infección o al tercer día después del inicio de los síntomas con una prueba rápida, lo que será útil para cribar infecciones activas con un diagnóstico posterior confirmatorio por PCR. Mientras que los anticuerpos IgG aparecen más tarde y confieren inmunidad a más largo plazo. Su positividad en sangre puede ser un indicador de una infección aguda en resolución o una infección previa ya resuelta.
En general, la realización de test serológicos es más sensible en pacientes que presentan más de 1 semana con síntomas, pero puede darnos valiosa información incluso sobre personas asintomáticas, por lo que su uso se está generalizando y contemplando en diferentes ámbitos además de los estudios de seroprevalencia:
- Hospitales: Para respuesta rápida en Urgencias, para pacientes con más de 7 días con síntomas, para control y seguimiento de profesionales sanitarios, para cribado ingresos por otras causas, para confirmación de PCR negativas con síntomas , para confirmar altas tras PCR positiva sin más síntomas.
La medición de anticuerpos en pacientes con varios días con sintomas evita el riesgo de exposición de profesionales sanitarios al no tener que tomar tantas muestras con hisopo, al tiempo que permite reservar la técnica PCR para detección precoz. - Atención primaria: Confirmar casos en pacientes con más de 7 días con síntomas, rastreo de contactos, confirmar desaislamiento tras PCR positiva sin más síntomas, confirmar infección pasada. Se ha demostrado que existen casos de seroconversión temprana por lo que su uso conjunto con la PCR puede aumentar el rendimiento de la técnica de rastreo de contactos.
- Residencias 3ª edad: Comunidades de convivientes y prisiones . Controles periódicos de todos los internos para cribado de casos.
- Ámbito Laboral: Control de infección reciente o pasada y seguimiento periódico de trabajadores con alto riesgo de contagio como son: policía, guardia civil, bomberos, conductores de ambulancia, funerarias , protección civil, empresas de gestión de residuos sanitarios , farmacéuticos, dentistas, empresas de limpieza y desinfección, etc.
- Personas vulnerables: Controles periódicos para detectar positivos de forma precoz en discapacitados, embarazadas, enfermos crónicos.
